Enhorabuena a nuestro compañero Raúl Ochoa por su participación en el artículo publicado en Nature, en el que se demuestra la limitación de crecimiento de los bosques por la competencia de los microorganismos del suelo en la absorción de fósforo y sus consecuencias para el secuestro de carbono.
El artículo muestra que la capacidad de los ecosistemas terrestres para secuestrar carbono adicional bajo concentraciones crecientes de CO2 depende de la disponibilidad de nutrientes en el suelo. Los estudios previos sugerían que los bosques maduros de suelos pobres en fósforo (P) tenían una capacidad limitada para secuestrar biomasa adicional bajo niveles elevados de CO2, pero la incertidumbre sobre el reciclado del P en el ecosistema y su respuesta frente al CO2 supone un cuello de botella esencial para la predicción mecanicista de la tierra como sumidero de C bajo el escenario de cambio climático. Al compilar la primera contabilidad integral del P para un bosque maduro limitado en P y expuesto a niveles elevados de CO2, se demuestra la alta probabilidad de que el P capturado por los microorganismos del suelo limite el reciclaje y la disponibilidad de P para su incorporación por las plantas. Los árboles utilizan el P de manera eficiente, pero la apropiación microbiana del P remineralizado del suelo parece limitar su capacidad para una mayor absorción y asimilación de P en condiciones elevadas de CO2 y, por lo tanto, su capacidad para secuestrar C adicional. Las estrategias de las plantas para estimular el reciclado microbiano del P y la incorporación por las plantas, tal como un incremento en la liberación del C de la rizosfera al suelo, serán probablemente necesarias para que los bosques limitados por P aumenten la captura de C y generen biomasa adicional. Los resultados identifican los mecanismos clave por los cuales la disponibilidad de P limita la fertilización de CO2 para el crecimiento de los árboles y van a servir para el desarrollo de modelos para predecir el almacenamiento de C en la Tierra a largo plazo.